Nos remontamos al año 1194 cuando 12 monjes cistercienses procedentes del Monasterio de Poblet, se instalaron en el antiguo castillo de Piedra Vieja junto al río Piedra. El Monasterio de PIEDRA es edificado en honor a Santa María la Blanca y fue construido a lo largo de tres etapas: gótica primitiva (S.XIII), gótica renacentista (S.XVI) y clásica-barroca (S.XVIII).
En 1843, Pablo Muntadas Campeny adquirió los edificios conventuales y fincas adyacentes por 1.250.000 reales a través de una Subasta Pública y, años después, su hijo Juan Federico Muntadas transformó la huerta existente en un jardín paisajista y las dependencias conventuales en una instalación hotelera e hidroterápica. A todo ello, en 1867, se añadió la construcción de una piscifactoría que fue pionera en España y de la que pueden verse algunas de sus pesqueras al visitar el Parque.
Catalogado como Conjunto de Interés Cultural y Bien de Interés Cultural en la categoría de Monumenento, el Monasterio de Piedra ha sido galardonado con la Medalla al Mérito Turístico por el Gobierno de Aragón en el año 2011.
El Conjunto Turístico del Monasterio de Piedra, ofrece al visitante un recorrido único, para descubrir todo su esplendor, la naturaleza e historia de la zona de Calatayud.
El Parque Natural está lleno de sorpresas y maravillosos rincones con atributos estéticos y paisajistas sorprendentes. A la belleza propia del río hay que añadir el bullicio y frescor de sus cascadas, la apacible quietud de sus lagos, en especial la del Lago del Espejo y el cantar o trineo de la variedad de aves que lo pueblan, de las que se han identificado más de 20 especies distintas.
A lo largo del paseo, se puede disfrutar de un espectacular paisaje formado por grutas, cascadas y lagos de gran belleza.
Con un horario de invierno de 9h a 18h y de verano de 9h a 20h, en el Parque se puede disfrutar además de una exhibición de vuelo de aves rapaces desde primavera hasta otoño.
El Monasterio Cisterciense se fundó por el I Abad de Piedra, Gaufredo de Rocaberti.
La intención inicial del I Abad era establecer una comunidad filial de Poblet en algún lugar no predeterminado de los territorios meridionales del Reino de Aragón. En 1203 empezaron a construir el Monasterio en su ubicación actual, manteniéndolo en uso hasta 1835. La construcción del Monasterio se realiza en los años de transición del Románico al Gótico. El característico estilo arquitectónico de la Orden está presente en el Monasterio a través del gótico cisterciense, arquitectura sobria, austera, sencilla y luminosa.
El Hotel es un Monumento Histórico Artístico, declarado Bien de Interés Cultural. Cuenta con sesenta y dos cómodas habitaciones construidas a partir de antiguas celdas de los monjes, con vistas al Parque, el Claustro o el Monasterio.
En el Hotel, se conjugan el Arte Cisterciense, la Historia, con una impresionante escalera renacentista del S.XVI, con las comodidades actuales, contando en las zonas comunes de salón de lectura, bar, televisión, wifi gratuito, piscina y SPA. Además de distintas salas de reuniones o de eventos.
El Spa con más de 500 metros cuadrados, ha sido diseñado para disfrutar de las sensaciones de luz, sonido y agua bajo bóvedas medievales. Un juego de luces ilumina la zona de aguas creando un ambiente único que invita al relax y al disfrute de los sentidos.
Diferentes espacios y salas esconden en su interior sorpresas sensitivas y relajantes.
Siglos de historia en un recinto singular con una arquitectura mágica, sorprendente y respetuosa con la belleza de un Monumento Histórico Artístico.
El Monasterio de Piedra cuenta con una oferta gastronómica que incluye platos típicos de Aragón elaborados con un toque actual e innovador. Los clientes podrán elegir entre el restaurante “Reyes de Aragón” ubicado en el Hotel y cuenta con la asesoría gastronómica del reconocido chef Enrique Martínez García, siendo un espacio lleno de historia al tratarse del antiguo dormitorio común de los monjes. En la decoración aragonesa de su amplio salón se pueden observar escudos de villas de la región y cuadros antiguos, entre ellos grandes óleos representando a los Reyes de Aragón que favorecieron a la comunidad de monjes Cistercienses: Alfonso II, su esposa doña Sancha, Pedro II y Jaime I. Contando además con el Restaurante “Piedra Vieja” con una capacidad de hasta 400 personas, siendo el lugar ideal para descansar y reponer fuerzas tras un día de visita. En el mismo, se encuentra también un bar cafetería y una terraza al aire libre llamada “La Pérgola”. Además de otros espacios, como el bar-cafetería “El Granero” y El bar-sala de estar “Gaufrido”. Para el buen tiempo, la oferta gastronómica se puede disfrutar en la magnífica terraza “Los Castaños”.
El Complejo Turístico Monasterio de Piedra, compuesto por El Parque Natural, el Monasterio Cisterciense del S. XIII, el Hotel-Spa y el restaurante Reyes de Aragón, son escenarios únicos para celebrar una boda o para cualquier otro evento menos convencional al aire libre.